Escribo intentos, porque he decidido no acabarlo, resulta un libro que no está mal, pero soy de la opinión que mi tiempo libre ha de ser invertido en lo que realmente me capte desde el primer minuto y el libro en cuestión no lo ha hecho.
Lo encuentro de lectura no muy dinámica, no te situa en la fecha histórica hasta avanzadas unas páginas, por otro lado, el narrador, el clérigo Lorenzo Ramo, deja demasiadas cosas en el aire, en muchas ocasiones concluye una afirmación diciendo algo así como: ...esto es así, o tal vez no....
Por otro lado, el libro de acerca a la persona del maestro Cayetano Ripoll, te hace tenerle simpatía por su bondad extrema, sus lecciones moralizantes, que contrastan tanto con los artífices de la resurrección del tribunal de la Inquisición en Valencia, a mediados del siglo XIX, y al final, saber que acaba en la horca.....
Por otro lado, el autor confiesa que la obra está inspirada en hechos reales, el ajusticiado existió y fue la última víctima del infame tribunal, pero el resto es fruto de la imaginación del autor, aunque se ajusta a lo que pudo ser; personalmente, el atractivo que encuentro en la novela histórica es mayor cuanto más fiel a los hechos históricos es, por lo que no puedo recomendar esta obra.
Pasa a la estantería de lecturas inacabadas.
Lo siento, pero no lo puedo recomendar.
:-)
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