Este pasado mes, que no tenia nada que leer en lo que a novelas ( lectura de ocio y evasión ) se refiere, recuperé un libro que tenía por leer de la colección Arturo Pérez-Reverte, Corsarios de Levante, recordando los buenos ratos que había pasado de aventura en aventura del capitán Alatriste.
Pero, ¡Sorpresa!, no me ha producido el mismo placer que recuerdo en la lectura de los otros libros de la serie. Pensando, pensando, encuentro el uso del lenguaje que hace el autor áspero, rudo, tal vez demasiado para mí ahora. Pero es que es el mismo lenguaje que había en los otros volúmenes!!.
En fin, uno evoluciona, y parece ser que a mejor, lo lamento por el autor, pero prefiero actualmente centrarme en relatos menos embrutecidos, más livianos en cuanto a forma.
La verdad es que la lectura ha de ser un placer, y ha de evolucionar con la persona.
Dime qué lees y te diré como eres.
Triste si con el paso del tiempo no mejoramos como personas, no se trata solo del tiempo en sí, sino de lo que hacemos con él.
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